Índice
- Amanece en el Masai Mara
- “Big five” – Los cinco grandes
- Safari en Kenia por el Masai Mara
- Primeros animales
- Leonas cazando
- Leona y bebé león
- Leones
- Guepardos
- Una gacela muerta en un árbol. Leopardos cerca
- Buitres
- Mara Serena Airport
- Búfalos, ñus, cebras y elefantes
- Límite entre Kenia y Tanzania
- La gran migración
- Llegamos al río Mara
- Cocodrilos
- Las víctimas de la gran migración
- Hipopótamos
- Hipopótamos bebé
- Picnic en Masai Mara
- Cebra bebé
- Rinoceronte negro
- Atardecer en el Masai Mara
No me podía creer que fuera nuestro último día de safari… Pero aún nos quedaba un día de safari en Kenia por el Masai Mara.
Amanece en el Masai Mara

Es alucinante dormir en mitad del Masai Mara. Oír las “risas” de las hienas en mitad de la noche, despertarte con los primeros rayos de sol y abrir la cremallera de tu tienda y disfrutar del amanecer. Naturaleza en estado puro.
Nuestra tienda se llamaba TAI que en Masai significa águila
Todos los tipos de alojamiento que puedes encontrar en un safari y dónde nos alojamos nosotros en el post |


Nos fuimos a desayunar para reponer fuerzas. El viaje del día anterior desde Lago Nakuru hasta el Masai Mara había sido demasiado duro.
No te pierdas nuestra aventura parando en los pueblos de la Kenia más profunda por una avería en nuestra minivan |
“Big five” – Los cinco grandes
Los cinco grandes o “big five”, como se conocen en inglés, es un exclusivo grupo de 5 animales:
- León
- Leopardo
- Rinoceronte negro
- Búfalo
- Elefante
El término de los cinco grandes, no se les atribuyó por su tamaño, aunque es lo primero que se suele pensar. Este nombre fue originado durante el siglo XIX cuando llegaron a África exploradores aficionados a la caza mayor. Los cinco grandes hacía referencia a los cinco animales más difíciles y peligrosos de cazar a pie.
El Masai Mara es uno de los lugares donde, si tienes suerte, podrás ver a los cinco grandes. Nosotros estuvimos a punto… Durante nuestros cinco días de safari vimos a 4 grandes. ¡No está mal!
Pero como siempre digo, ya tenemos excusa para volver.
Safari en Kenia por el Masai Mara
Totalmente renovados, después de varias horas de sueño y un buen desayuno, empezamos safari por el Masai Mara.

Primeros animales
Atravesamos las puertas del Masai Mara y vimos los primeros animales, como siempre, los mas comunes: gacelas, impalas, ñus y cebras.


Leonas cazando
Acabábamos de entrar en el Masai Mara y ya nos encontramos con dos leonas y un león joven, acechando a una manada enorme de ñus.



Aunque se encontraban muy lejos de las leonas, los ñus sabían que estaban en peligro. Miraban fijamente hacia donde estaban las leonas. Cada vez que éstas daban algún paso, corrían despavoridos todos a la vez. Cuando ellas se paraban, los ñus dejaban de correr.
Te dejo un video de ese momento porque es alucinante.
Viendo aquello me puse muy nerviosa. Mucha gente ve escenas de caza durante los safaris. Por un lado me hubiera encantado verlo, ¡debe ser alucinante!, pero por otro lado, no sé si sería muy agradable…

Las leonas optaron por sentarse y esperar. Estuvimos allí un buen rato observando, pero parecía que aquello iba para largo, así que decidimos continuar.
Leona y bebé león
Continuamos recorriendo el Masai Mara, cuando vimos a lo lejos, muy a lo lejos, una leona con su bebé. Parecía que ella quería ir en una dirección y su hijo se negaba a hacerle caso.

La leona lo agarró con su boca y lo llevó hacia donde ella quería, pero el leoncito se escapó y empezó a correr en dirección contraria…



Bebé león desobediente
La leona se tumbó a esperar y finalmente el pequeño decidió volver con ella. Lo cogió con su boca y continuó su camino.




Pero una vez más el pequeño león desobediente se escapó. Él no quería andar, prefería quedarse allí sentado. Desde lejos podíamos oír sus minúsculos y agudos rugidos, que eran más bien como maullidos de gato.


Los tiempos de espera en un safari
Durante el safari hay muchos tiempos muertos, tiempo en el que estás recorriendo el parque en busca de animales o en el que simplemente esperas. Pero ese tiempo, siempre merece la pena.
Aquello duró mucho tiempo. La leona lo cogía, él se escapaba, y ella tenía que esperar largo rato hasta que el bebé decidía obedecer. Así una y otra vez.
Estaban muy lejos así que le dijimos a nuestro guía, Alex, que podíamos continuar con el safari. Pero él nos dijo que no, que esperáramos, que se iban a acercar. Y eso hicimos, nos quedamos allí, esperando.
El guía es el que sabe, el que conoce a los animales y su comportamiento, así que haz siempre caso a lo que te diga el guía.
El momento más emotivo del safari
¡Y mereció la pena esperar! Cansada ya de que el bebé león no le hiciera caso, la leona lo volvió a coger y comenzó a caminar hacia nosotros. ¡Alex tenía razón!



Antes de hacer el safari, había visto muchas fotos en internet. Una de las fotos más bonitas que vi y la que más me emocionó, fue la de una mamá leona llevando a su bebé. Nunca imaginé que vería aquello con mis propios ojos.


Y allí estaba ante mis ojos y cada vez más cerca. Al igual que la primera vez que vi los elefantes en Amboseli, me puse a llorar de la emoción. No podíamos parar de mirarlos, grabarlos y hacerles fotos.
No te pierdas nuestro primer día de safari por Amboseli en el post |

El bebé león era como un gatito, me recordaba mucho a mis gatos.


La leona pasó por delante de nuestra minivan y se alejó caminando con su bebé.


Todavía impactados y emocionados por lo que acabábamos de presenciar, continuamos explorando el Masai Mara. ¡Y lo mejor era que el safari acababa de comenzar!
Leones
Parecía que estábamos en zona de leones porque un poco más adelante nos encontramos con un león descansando sobre la hierba.
Estaba muy lejos, aún no habíamos visto un león de cerca. El día anterior vimos uno pero estaba durmiendo entre los arbustos y no pudimos verlo bien.
No te pierdas nuestro primer día de safari por el Masai Mara en el post |

Estuvimos un rato observándolo hasta que se levantó y se escondió entre unos arbustos.


Seguimos avanzando. Algo más adelante una leona y un león descansaban a la sombra de unos arbustos, pero esta vez sí que pudimos verlos muy de cerca.

Impresionan sus garras, su tamaño, sus músculos y su enorme melena. No me extraña que lo llamen el rey de la selva.
Estaba algo escondido y no lo veíamos bien, pero como he dicho antes, en un safari hay que tener mucha paciencia. Finalmente el león salió y pudimos verlo con total claridad.


Guepardos
Alex, nuestro guía, iba todo el tiempo pendiente de la radio. Por ahí se comunicaba con otros guías y se avisaban entre ellos si encontraban algo interesante.
Algo sonó en la radio, no entendíamos nada porque hablaban en swahili, pero Alex aceleró así que le habían informado de algo. No nos dijo de qué se trataba, para que nos pillara por sorpresa.
Paró la minivan y los vimos, un grupo de cinco guepardos descansando a la sombra de unos arbustos.


Alex nos explicó las diferencias entre los leopardos y los guepardos:
- Pelaje. El guepardo tiene el pelo más amarillo y las manchas son más redondeadas.
- Manchas de los ojos. El guepardo tiene unas manchas características, unas líneas negras que van desde sus ojos hasta el cuello, como si fueran lágrimas negras
- Velocidad. El guepardo gana en velocidad, siendo el animal terrestre más rápido que existe.
- Cuello. El leopardo tiene el cuello más ancho, tiene una gran fuerza en el cuello ya que suele subir a sus presas a los árboles.


Después de un rato observándolos, a Alex le volvieron a informar de algo por radio, porque salió disparado hacia otro lugar.
¡Estaba siendo un día muuuuuy emocionante!

El Masai Mara me estaba sorprendiendo más en un solo día que el resto de lugares que habíamos visitado en los 4 días anteriores.
Una gacela muerta en un árbol. Leopardos cerca
Lo que vimos fue muy impactante. Una gacela muerta colgada de un árbol. Sin duda el Masai Mara nos estaba mostrando el lado más salvaje de Kenia
Alex nos explicó que aquello lo había hecho un leopardo, cazan a sus presas y las suben en un árbol para que estén “a salvo” mientras ellos siguen cazando. Por lo tanto, debía haber leopardos cerca y tendrían que volver a por su presa.

Estábamos hartos de ver gacelas durante el safari y es un animal demasiado grande como para que otro animal pueda subirla a un árbol llevándola en su boca. ¿Cómo era aquello posible?
La explicación de Alex sobre la fuerza que tienen los leopardos en el cuello cobraba todo el sentido.

Estuvimos un largo rato esperando. Mucho tiempo. Pero los leopardos no aparecían, el safari es así, hay que tener mucha paciencia y a veces puedes tener suerte, pero otras veces no.
Continuamos. Nos dirigíamos al río Mara, lugar donde se puede contemplar durante ciertos meses del año el mayor espectáculo de la naturaleza. La gran migración.
Buitres
Vimos un grupo de buitres comiendo carroña.
En un safari no solo ves animales en libertad… también ves muchísimos animales muertos, sobre todo gacelas, cebras y ñus.


Más adelante nos encontramos con unos rangers y trabajadores del parque. Después de todo lo que acababa de ver, leones, guepardos, la gacela muerta en el árbol… Me dio un escalofrío por todo el cuerpo al verlos allí de pie, totalmente expuestos.

Mara Serena Airport
También pasamos por el Mara Serena Airport, el aeropuerto del Masai Mara. Sí, al Masai Mara se puede llegar en coche o en avioneta y para ello tienen un pequeño aeropuerto que consta de una casetilla de piedra, una pista de aterrizaje de tierra y poco más.
Supongo que llegar allí en avioneta debe subir considerablemente el precio del safari.

Búfalos, ñus, cebras y elefantes
De camino al río Mara encontramos más animales. Una manada de búfalos pastando y un numeroso grupo de cebras y ñus comiendo y disfrutando de un baño en un pequeño riachuelo.
También vimos elefantes, pero vimos tantísimos en Amboseli que nuestro objetivo en el Masai Mara era ver otro tipo de animales.
Nuestro safari por Amboseli en el post |



Límite entre Kenia y Tanzania
A pocos minutos de llegar al río Mara, hicimos una parada y Alex nos dijo que podíamos bajar del coche.
Nos encontrábamos en el límite entre el Masai Mara y el Serengeti, o lo que es lo mismo, el límite entre Kenia y Tanzania. Una piedra marcaba el límite entre los dos países.

Nos dimos cuenta de que teníamos algunos espectadores. Seis jirafas nos observaban a lo lejos, una de ellas, la más cercana, se resguardaba del sol a la sombra de un árbol.




La gran migración
En el río Mara tiene lugar uno de los mayores espectáculos de la naturaleza, la gran migración. Normalmente tiene lugar entre los meses de julio y octubre, nosotros viajamos a Kenia en septiembre y tenía la esperanza de poder presenciar aquella maravilla, pero no fue así…
Justo antes de llegar al río Mara, nos encontramos una cantidad enorme de ñus, cebras y gacelas, millones y millones de estos animales. Parecía que la gran migración ya había sucedido ese año y estaban todos concentrados en aquella zona.
Era impresionante ver tal cantidad de animales juntos, no m quiero imaginar lo que tiene que ser presenciar la gran migración.
Llegamos al río Mara
Llegamos al río Mara, Alex aparcó la minivan y nos preguntó si queríamos ir al baño. En un safari no tienes muchas posibilidades de ir al baño, así que en cuanto tengas una oportunidad, te recomiendo que la aproveches.

Después de ir al baño, nos acompañó a un edificio de piedra donde se encontraban los rangers y nos presentó al que sería nuestro guía durante el recorrido por el río Mara. Nos recomendó que le diéramos una propina al finalizar.

Este recorrido lo haríamos a pie, me dio un poco de miedo la idea de caminar a pie por allí, pero el ranger nos aseguró que no era peligroso, además llevaba un arma, por lo que pudiera pasar.
Comenzamos el recorrido bordeando el río Mara.



Cocodrilos
Encontramos los primeros cocodrilos. Durante la gran migración, numerosos animales que cruzan el río Mara para encontrar agua y alimento al otro lado, mueren atacados por los cocodrilos, que esperan impacientes en el río para cazar a sus presas.
Además de los cocodrilos, otros depredadores aprovechan la concentración de animales que se produce en el río Mara durante la gran migración para cazar. Evidentemente no todos consiguen llegar al otro lado, muchos mueren en el intento.


Las víctimas de la gran migración
Seguimos caminando y empezamos a notar un olor insoportable, un olor que nunca jamás había olido en mi vida, asqueroso y nauseabundo.
A orillas del río, una gran cantidad de aves carroñeras se alimentaban de aquellos animales muertos que no habían conseguido cruzar. Era bastante desagradable, tanto la imagen como el olor, pero aquello era naturaleza en estado puro. Como había dicho antes, en el Masai Mara encontrarás el lado más salvaje de Kenia.



Hipopótamos
Continuamos bordeando el río Mara y llegamos a una zona con carteles de “stop” y “prohibido el paso”, acompañados de cráneos de otros animales que le daban un toque espeluznante.
Al otro lado, un grupo de hipopótamos descansaban y se daban un baño en el río.


El hipopótamo está considerado uno de los animales más peligrosos de África. Es el animal que más muertes humanas causa, por encima de los leones o rinocerontes, así que te puedes imaginar el motivo de esos carteles.
Es un animal muy agresivo y tiene unos enromes colmillos que suele usar cuando ataca.


En el suelo, vimos unos agujeros enormes, parecían pisadas de algún animal, pero ¿con ese tamaño?
El ranger nos dijo que eran pisadas de hipopótamo, durante el día descansan y se bañan en el río y por las noches salen a comer. Son animales herbívoros y durante la noche pueden recorrer hasta 10km buscando hierbas o frutos para comer.
Desde la otra orilla del río disfrutamos observando a aquellos enormes hipopótamos.






Viéndolos allí tan tranquilos, tumbados y dándose un baño me parecía imposible que fueran animales tan agresivos y peligrosos.



Hipopótamos bebé
Dos hipopótamos bebés disfrutaban del baño acompañados de su mamá. ¡Me encantan los animales bebé! ¡Y ese día estaba viendo muchos de ellos!



Pasamos bastante tiempo recorriendo el río y observando a los enormes hipopótamos al otro lado.

Llegó la hora de volver, todos los árboles tenían sus ramas llenas de nidos.


Picnic en Masai Mara
Alex, se encargó de hablar con nuestro alojamiento el día anterior y por la mañana antes de salir nos prepararon algo de comer.
Cuando volvimos de nuestro recorrido por el río Mara, le dimos una propina al ranger y nos fuimos a la minivan, donde Alex nos esperaba descansando a la sombra.

Alex sacó la comida. Venía en unas cajas de cartón y unas bolsas de tela. En Kenia está prohibido usar bolsas de plástico desde 2017, es el país con prohibición más dura por uso de plásticos, con multas de hasta 32 mil euros y penas de hasta 4 años de cárcel.
Disfrutamos de nuestro picnic sentados en un tronco a la sombra de un árbol. En pocos minutos teníamos a varios pájaros a nuestro alrededor comiendo las migas que caían al suelo.


Después del picnic nos pusimos en marcha. Eran unas 2 horas de camino de vuelta así que ya nos dirigíamos a la salida del Masai Mara. Yo no quería que aquello acabara.
Cebra bebé
Ya he dicho que me muero con los animales bebés, y aquel día ya había visto varios.
Lo siguiente fue una cebra bebé. Correteaba un poco torpe entre el resto de animales, ¡super pequeña! Tuvimos que pararnos para observarla un rato, era muy graciosa.


Continuamos nuestro recorrido.
De los cinco grandes, durante nuestro safari habíamos visto leones, elefantes y búfalos. Nos faltaba el leopardo y el rinoceronte negro.
El rinoceronte negro es muy difícil de ver, así que ni me planteaba que pudiéramos verlo en las pocas horas de safari que nos quedaban. Mi obsesión antes de irnos de allí era ver algún leopardo.
De pronto Alex recibió un aviso por radio. Frenó la minivan, dio la vuelta y condujo a toda velocidad.
No teníamos ni idea de qué estaba pasando. “¿A dónde vamos?” Pero como siempre Alex no nos dijo nada, es mucho mejor la sorpresa. ¡Y menuda sorpresa!
Rinoceronte negro
Alex paró la minivan. Un rinoceronte negro se daba un baño entre unos arbustos. Aquello sí que no me lo esperaba, es uno de los animales más difíciles de ver, y lo teníamos ante nosotros, y muy cerca.


Habíamos tenido bastante suerte. Vimos a cuatro de los cinco grandes. Leones, búfalos, el rinoceronte negro y miles de elefantes en Amboseli. Además, también vimos varios rinocerontes blancos en lago Nakuru.
Nuestro safari por Amboseli en el post |
Nuestro safari por Lago Nakuru en el post |


El mejor día de safari nos lo había dado el Masai Mara. Era una pena que se acabara pero fue la mejor despedida que podíamos haber tenido.

Atardecer en el Masai Mara
Llegamos al alojamiento, nos dimos una ducha y nos sentamos en el porche de nuestra tienda para ver el último atardecer en el Masai Mara, una imagen que no olvidaré jamás.


Cuando anocheció nos fuimos a la cabaña central a cenar.
Antes de llegar vimos una hoguera que habían encendido con varios bancos alrededor. Nos sentamos allí un rato. Solo se oía el crujido de la leña del fuego, los árboles y de vez en cuando algunos animales.
En Masai Mara tienes una sensación constante de estar en contacto con la naturaleza de una forma que no se siente en ningún otro lugar.

Para finalizar el día, hicimos lo que ya se había convertido en nuestra rutina a la vuelta del safari. Tomamos unas cervezas en el bar mientras charlábamos con nuestro amigo Milton, el camarero Masai, y luego fuimos a cenar una crema de verduras bien calentita.


Y aquí acabó nuestro safari por Kenia, una de las experiencias más bonitas que he vivido en mi vida. Ahora tocaba recorrer la costa de Kenia y descubrir sus paradisiacas playas.
No te pierdas nuestra ruta completa de 16 días por Kenia en el post |
¿Te ha gustado este post? Puedes dejarme un comentario para dar tu opinión, compartir tu propia experiencia o realizar cualquier consulta. ¡Intentaré resolver todas tus dudas!
¡Suscríbete al blog para enterarte de todas las novedades!
¡Sígueme en las redes sociales para no perderte ni un detalle!